Los elementales que hacen parte del Universo, Tierra, Agua, Fuego y Aire integrados a nuestro cuerpo, mente, emoción y espíritu, mueven ciertas energías dentro de cada uno de los seres humanos, determinando de una u otra forma parte de nuestra personalidad en mayor o menor proporción, y cuando las reconocemos podemos entender ciertos comportamientos propios.

¿Cómo conectarnos con los elementales a través del sonido?

En un lugar tranquilo, preferiblemente en contacto con la naturaleza, respiramos profundo sintiendo y percibiendo la energía del lugar tranquilo y todo el bienestar que la Madre Tierra nos da.

Conexión con Tierra

Llamamos al elemento Tierra con el sonido del tambor, lento y pausado, firme y en compás, y con la ayuda de los Ángeles de Luz del anillo de Tierra, integramos en nosotros: fuerza, seguridad,  abundancia, fortaleza.

Conexión con Agua

Llamamos al elemento Agua con melodías suaves, fluidas, el cantar sereno y tranquilo, y con la ayuda de los Ángeles de Luz del anillo de Agua, integramos en nosotros:  tranquilidad,  protección,  fluidez en nuestro diario vivir,  equilibrio,  armonía  pureza,  claridad y transparencia.

Conexión con Fuego

Llamamos al elemento Fuego con el cascabel, el palo de lluvia, las maracas, el tambor, y con la ayuda de los Ángeles de Luz del anillo de Fuego, integramos en nosotros: pasión, avance,  decisión, ayuda a soltar situaciones que no queremos repetir en nuestras vidas, cierre de ciclos.

Conexión con Aire

Llamamos al elemento Aire con el sonido sutil, el canto armónico en tonalidades agudas, las campanas, y con la ayuda de los Ángeles de Luz del anillo de Aire, integramos en nosotros:  bienestar, felicidad, alegría, la conexión con lo Divino.

El sonido ayuda a evocar cada uno de estos elementos, a ambientar cada uno de estos momentos, y con la asistencia de los Ángeles y la energía que emana sonido/espíritu permite que la vibración del espacio en que nos encontramos sea elevada de una forma tal que nuestro espíritu se conecta directamente con la Luz y el alma se libera de lo que no esté generando bienestar.

An’anasha,

Laura Rios V